Abr242019

UNA REALIDAD SILENCIADA

El pasado 27 de marzo de 2019 tuvo lugar la Jornada sobre la Prevención del Suicidio: una realidad silenciada, organizada por la Confederación SALUD MENTAL ESPAÑA. Contó con la presencia de una persona experta, superviviente de suicidio: José Luis Herrera, vicesecretario de AFES Salud Mental y miembro del Comité Pro Salud Mental en Primera Persona.

Imagen del acto desde detrás del públicoEl acto fue inaugurado por la ministra de Sanidad, Consumo y Bienestar Social, María Luisa Carcedo, que afirmó que “es imprescindible derribar, uno a uno, todos los mitos del suicidio”. La Jornada reunió en Madrid a entidades de salud mental y de la discapacidad, así como a expertos y personas con experiencia con la finalidad de dar protagonismo a la importancia de la prevención del suicidio.

Nel A. González Zapico, presidente de SALUD MENTAL ESPAÑA, informó sobre distintos factores a tener en cuenta sobre el suicidio: “es el mayor problema de salud pública de Europa, según reconoce la Organización Mundial de la Salud. Es urgente implementar medidas eficaces y adecuadas en la prevención del suicidio. La cifra de fallecimientos por esta causa en nuestro país es alarmante y su disminución debe constituir una prioridad para todos. La sociedad no puede seguir mirando para otro lado. Desde SALUD MENTAL ESPAÑA reivindicamos un Plan Nacional de Prevención del Suicidio como herramienta fundamental a la hora de abordar esta problemática que causa tanto sufrimiento a las personas y a su entorno”.

El debate

A continuación, tuvo lugar un debate entre José Luis Herrera, Nel González y Jesús Martín Blanco, delegado de Derechos Humanos y Discapacidad de CERMI Estatal.

José Luis Herrera:

Cristina García, conductora del debate, Nel González Zapico, Jesús Martín Blanco y José Luis Herrera en el debate“Poder hablar en primera persona de haber sobrevivido al sufrimiento es por causa de factores que influyeron en que me rescataran a tiempo de salvarme la vida”.

“Es importantísimo impulsar un Plan Nacional de Prevención del Suicidio, y dotarlo de todos los recursos e ingresos económicos necesarios”.

“Lo que lleva a una persona a tener una conducta suicida es la desesperación y el dolor. Se llaman conductas suicidas porque son conductas, son repetitivas. En concreto yo llevo cuatro. Me gusta pensar que esta vez he sobrevivido porque aún tengo un trabajo que hacer: entre otras cosas ayudar a otras personas que pasan por un proceso de sufrimiento. Yo ahora mismo estoy muy recuperado. Resucitado, como me gusta decir a mi entorno más cercano. Pero cuando llegas a esos límites lo que quieres es dejar de sufrir”.

“Si se crea un número de teléfono de 3 cifras a lo mejor será memorizado rápidamente por muchas personas. Los profesionales no están preparados. No hay una asignatura ni en psiquiatría ni en psicología que trate sobre el suicidio. También se podría dar formación en gestión de emociones y habilidades sociales desde la escuela. Eso sería otra forma de prevención. Y es ahí, en la prevención del suicidio donde debemos poner nuestros esfuerzos. Las terapias psicológicas son muy efectivas, pero no se consiguen gratuitamente en el sistema sanitario. Eso también hay que cambiarlo. La formación en suicidio no existe y debe ser muy compleja. Y digo esto consciente de que, si hay algo diverso en el mundo, es la mente humana”.

“He oído frases que valoran el suicidio como un acto de cobardía, de egoísmo. Me gustaría que quienes dicen eso se pusieran en mis zapatos”.

Ante la pregunta “¿tú qué le dirías a una persona que está pensando en acabar con su vida?”: “hay una frase que la llevo por bandera, que es: acompañar es respetar el desorden y la confusión, no de imponer el orden y la lógica. Lo mejor es dejar que la persona hable. Es muy difícil gestionar este problema. Me imagino los que están tras el teléfono de la Esperanza y me imagino que debe ser muy complejo. Escuchar, respetar y no imponer nada, creo que es lo que más agradecer la persona en ese momento. Porque decir cualquier otra cosa serían tópicos y estereotipos”.

Nel González:

“Los mecanismos que se deberían poner en marcha para prevenir el suicidio sería conseguir, primero de todo, el bienestar para todas las personas, que tengamos una vida más vivible, no tan competitiva, sin desahucios… No un consumo desaforado, sino un consumo normal. Me encantaría que no sólo las empresas, sino las personas nos aplicáramos a nosotras mismas los objetivos del desarrollo sostenible. Y por otro lado, más importante aún, está la reivindicación de ese sufrimiento. Deberíamos tomar conciencia de que no se puede dejar en manos del voluntarismo. Tendrían que existir mecanismos para que cualquier persona que nota a alguien de su entorno pueda pedir consejo y tomar medidas. Sin existir esos medios, luego surge la culpabilidad”.

“Mientras pensemos que la salud mental o el suicidio son cosa de otros, nunca estaremos comprometidos con el cambio”.

“En nuestra sociedad no tenemos conciencia de que existe ni la salud mental ni el suicidio. Necesitamos abordar estas dudas de la educación, de la intervención, de la necesidad de la comunicación, de experiencias constructivas. Si nos convencemos de que son temas que van con nosotros, será mucho más fácil”.

Jesús Martín Blanco:

“Es muy difícil hacer este abordaje si en este país aún se institucionaliza a personas diagnosticadas de trastorno mental, se siguen practicando las contenciones mecánicas… Aún hay mucho estigma, muchos problemas con la contratación. Por eso debemos hacer mucha salida del armario. Aún tenemos mucho miedo de decir que tenemos un problema de salud mental. Y eso provoca en las personas un binomio muy perturbador que menoscaba su autoestima y provoca comportamientos indeseables. Por eso debemos actuar a muchos niveles, porque no tenemos tiempo que perder en el momento en que se nos van vidas. Debemos trabajar para que la vida en común sea una realidad. Porque, para las personas con trastornos mentales, esa vida es una realidad muy lejana.”

“El suicidio se debe incorporar en la agenda de las políticas públicas, porque la ocultación y el oscurantismo impiden un abordaje eficaz de un problema que debería ser un asunto de Estado”.

“Igualmente, debemos invertir todos los esfuerzos en erradicar el estigma hacia las personas con problemas de salud mental, poniendo el foco en sus derechos humanos, tantas veces conculcados. Porque la incomprensión, la institucionalización y los estereotipos provocan tal sufrimiento que compromete vidas humadas”.

“Es necesario que los periodistas y los medios de comunicación estén informados. Para mí sensibilizar es un terreno resbaladizo, porque sensibilizar es un concepto muy personal. Creo que es mejor formar, e incluso informar. Pero el periodismo es un terreno que tiene mucha precariedad y tiene muchos cambios, por lo que hay que estar constantemente alerta”.

Las cifras, los estereotipos

Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), en España fallecen alrededor de 3.600 personas al año por esta causa, lo que supone 10 personas al día, algo que no impide que todavía a día de hoy sea una realidad silenciada que conlleva un gran estigma. En el último año, las muertes por suicidio han aumentado un 3,1% en nuestro país, lo que pone de manifiesto la urgencia de abordar esta situación.

Entre los estereotipos y mitos que rodean al suicidio, se encuentra que las personas que lo intentan son egoístas, o bien se les atribuye la cualidad contraria (la valentía), cuando lo cierto es que es una conducta que responde a un intenso sufrimiento de la persona. Otra de las falsas creencias asociadas al suicidio es que la persona no avisa nunca a su entorno de sus intenciones, cuando la realidad es que en muchas ocasiones las revela de alguna manera.

En el cierre del acto, Nel González Zapico explicó que la jornada supone el inicio de las actividades que la Confederación SALUD MENTAL ESPAÑA desarrollará en el marco del Día Mundial de la Salud Mental, que se celebrará el próximo 10 de octubre. Como cada año, la Confederación seguirá el tema central elegido por la World Federation for Mental Health (WFMH) para conmemorar este día, que en 2019 es la prevención del suicidio.

 

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